Hace bastante tiempo que no publicaba en este
medio, sin embargo hoy en una charla explicativa con compañeros de trabajo y explicándoles
el por qué mi pasión por el skinhead, me he decidido a renovar el concepto. Y
es que precisamente de eso se trata el movimiento, de evolución. La conjetura
que repito en mis platicas explicativas sobre lo que somos o hacia dónde vamos
es la misma, la sociedad como sabemos es cambiante. En nuestra "onda"
lo que se conserva es la pasión por la música, la estética y algunos amigos. Al
ver este blog me doy cuenta de lo mucho que se cambia. Incluso algunos de los fotografiados
yacen en el olvido del referente skinhead local. Algunos otros, ya no solo no
hablan, sino además se han vuelto personas non gratas. En mi caso particular
mantengo el amor por la foto, mi vicio por la música ha crecido y lo sharp ya
lo llevo hasta en la piel. Como me comentaron hace poco en uno de mis albums
del face, "esos que salen, eran de los que no les daba miedo decirse antirracistas..
¡como cambia la gente¡". Y sí, sin mas ni mas la gente va, viene, regresa,
se cambia de bando, se vuelve facha, apolíticos, dudosos, sospechosos e incluso
raperos o electros. Por lo cual solo basta inferir, que cada quien vive el
skinhead como le acomoda, como puede o por épocas, por etapas de vida, por ramo
laboral e incluso por parejas. Lo realmente trascendental para mi, es mantenerme,
pero eso como el nivel de fanatismo… es personal.
